Primeros auxilios en la cocina: desde los utensilios hasta la comida

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Muchos expertos señalan la cocina como el lugar más frecuente en el que se producen los accidentes domésticos que precisan de primeros auxilios.

En ella se encuentran numerosos utensilios afilados como cuchillos y también elementos como pueden ser los productos de limpieza, pero no solo hay que tener cuidado con estos, también se debe prestar especial atención a los alimentos, tanto a su fecha de caducidad para evitar intoxicaciones como a su forma para evitar atragantamientos. 

Hay que hacer una mención especial a las quemaduras que se producen en la cocina durante la preparación de las comidas, bien sea con el fuego y la sartén, con el horno o con algún elemento que conserve el calor como puede ser un plato o un vaso tras unos minutos en el microondas. 

¿Dónde utilizar primeros auxilios en la cocina?

• Quemaduras. Estas situaciones son las más comunes y donde se precisa del uso de los primeros auxilios de una forma rápida y efectiva. Así, si se ve en esa situación, deberá colocar la zona donde se ha producido la quemadura bajo el grifo con agua fría durante unos diez minutos para aliviar el dolor y taparla transcurrido ese tiempo.
• Cortes. Al cocinar hay que prestar especial atención cuando estamos manipulando utensilios punzantes y cortantes. Por ejemplo, siempre hay que alejar los dedos del filo de los cuchillos y realizar este proceso de forma lenta y cuidadosa. Ante un corte leve donde el sangrado es moderado, se presionará la herida de forma suave con una gasa o papel limpio y tras controlar el sangrado se limpiará la zona afectada y se cubrirá. Recuerda siempre antes tratar el corte con las manos limpias para evitar infecciones.
• Intoxicaciones. Cuando hablamos de intoxicaciones alimentarias no solo hay que pensar en aquellas que se producen tras ingerir productos caducados, también se incluyen alimentos mal cocinados (crudos o cortados como pueden ser una mayonesa) o que no se han desinfectado/limpiado de forma correcta como puede ser el caso de las verduras. Los síntomas de una intoxicación suelen aparecer entre dos y seis horas después de tomar el alimento con náuseas, vómitos, fiebre o diarrea, entre otros. Se recomienda una dieta blanda y tomar mucho líquido para estar hidratado.
• Atragantamientos. En el caso de los adultos suelen producirse atragantamientos cuando no se mastica lo suficiente un alimento o cuando se introduce demasiada comida en la boca. Sin embargo, son los niños quienes tienen más riesgos de asfixia con la comida, sobre todo con aquellos alimentos redondos, como pueden ser un tomate cherry o una uva, o frutos secos como las nueces. Para detectar si una persona está sufriendo un atragantamiento, tendrá dificultades para respirar y toser y un color azulado. En esas situaciones, se realizará la maniobra de Heimlich, es decir, se colocará una mano cerrada por encima del ombligo y por debajo de las costillas de la víctima mientras que la otra mano debe sujetar el puño y presionar con un movimiento hacia arriba.