Reconocí algunos asesinos en serie entre los que Bergoglio había lavado los pies en su visita a la cárcel
La periodista argentina Alicia Barrios, que conoce desde hace 17 años a Jorge Mario Bergoglio, revela en el libro «Mi amigo el padre Jorge» (Romana Editorial), a un Bergoglio «íntimo» que «no difiere en lo más mínimo» del actual Papa. A su juicio, sus gestos y palabras son de tanta «riqueza» que le convertirán en «santo».
«Es un hombre que tiene gestos de santidad. Francisco va a ser santo», asegura Barrios en una entrevista con Europa Press con motivo de la presentación de su libro esta semana en Madrid.
Barrios, que ha «caminado» durante 14 años como periodista junto a Bergoglio, cubriendo la información de la Iglesia de Buenos Aires, y que es amiga personal del Pontífice –se felicitan por sus cumpleaños y almuerzan juntos–, asegura que Francisco «es la misma persona» que ella conoció en Buenos Aires (Argentina).
«Voy entrecerrando los ojos en sus viajes y voy adivinando lo que va a decir«, afirma, al tiempo que recuerda todas las anécdotas que vivió a su lado. Concretamente, cuenta una que le ocurrió en Argentina al acompañar a Bergoglio en una visita a una cárcel. «Yo que trabajé en crónica, reconocí a algunos asesinos en serie entre los que Bergoglio había lavado los pies. Fue un momento tremendamente emocionante», señala.
En el libro cuenta otras muchas anécdotas de la etapa de Bergoglio como arzobispo, pero sobre todo, Barrios quiere que sirva para «evangelizar» y «dejar su testimonio, su palabra». Además, a este pronto se sumará otro libro sobre todos los momentos que la periodista ha vivido con Bergoglio ya como Papa, en estos últimos tres años.
Barrios también destaca la «gran vocación de cura» de Bergoglio y recuerda un Viernes Santo en una procesión en Argentina cuando él era cardenal e iba caminando y bendiciendo a la gente. «Le dije: ‘Cómo te gusta trabajar de cura’. Y me dice: ‘Es lo que más me gusta en la vida, yo no nací para obispo'».
Bergoglio fue elegido Papa en el Cónclave el 13 de marzo de 2013 pero para Barrios, sus gestos y sus palabras no han cambiado. «Se siguen repitiendo igual. El testimonio de todo lo que él era antes y lo que no dejó de ser hoy», subraya.
(RD/EP)
