La noche del sábado 15 de marzo de 2025 se convirtió en una pesadilla para cientos de jóvenes que disfrutaban de un concierto en el Club Pulse de la ciudad de Kocani, en el sur de Macedonia.
Un incendio provocado por un espectáculo pirotécnico durante la actuación de la banda local DNK desató el caos en el recinto, dejando un saldo trágico de al menos 59 muertos y 155 heridos.
El Club Pulse, una antigua fábrica de alfombras reconvertida en discoteca, operaba de forma ilegal desde hacía más de un año con una licencia falsa y sin los permisos necesarios. En el momento del incendio, el local albergaba el doble de su capacidad oficial de 250 personas, con una sola salida de emergencia disponible.
Según el Ministro del Interior Panche Toshkovski, las víctimas mortales tenían entre 18 y 23 años, incluyendo un agente de policía que se encontraba de servicio en el local. La Dra. Kristina Serafimova, directora del Hospital General de Kocani, informó que las muertes se produjeron por inhalación de humo, quemaduras y una estampida desencadenada por el pánico.
Investigación y detenciones
Las autoridades han iniciado una investigación por soborno y corrupción que ya ha llevado a la detención de varios funcionarios locales sospechosos de permitir que el club siguiera operando. Entre los detenidos se encuentran:
- El organizador principal del club nocturno
- El ex secretario de Estado del Ministerio de Economía
- Un alto funcionario del ministerio
- El ex director regional de protección y rescate
Más de 20 personas están bajo sospecha, incluyendo 15 que estaban siendo interrogadas por la policía el domingo.
Algunos de los sospechosos involucrados en la gestión ilegal del club perecieron en el incendio.
Reacciones y solidaridad
La tragedia ha conmocionado a todo el país y ha generado muestras de solidaridad internacional. El Papa Francisco, aún hospitalizado en Roma, envió un telegrama expresando sus condolencias. El Primer Ministro albanés Edi Rama ofreció «cualquier asistencia que pueda ser necesaria».
El alcalde de Strumica, Konstantin Kostantinov, confirmó la muerte del baterista de 24 años de la banda DNK entre las víctimas. De los 11 miembros del equipo de la banda, solo sobrevivieron tres: uno de los cantantes principales, un guitarrista y una corista.