Es la nueva desvergüenza del Gobierno PSOE-Podemos.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, quiere gastar más de 20.000 millones para alimentar sus chiringuitos feministas mientras los españoles no tienen ni para echar gasolina ni pagar la factura de la luz.
Un esperpento más que forma parte este Ejecutivo que aolo quieren forrarse, enchufar a sus amigos y sacar tajada política.