«¿Es usted el protector del número 1 y por eso no le dejan dimitir?» Que a uno le suelten eso en sede parlamentaria debe ser chungo. Lo que pasa es que estos socialistas y amigotes tienen la piel tan dura que todo les resbala.
Es exactamente eso lo que ocurre con el fiscal general del Estado, Álvaro Ortiz, que sí se puso muy nervioso el día que se enteró de que le investigaban por revelación de secretos y se puso a borrar del móvil hasta la aplicación del tiempo. Pero en el Senado, donde compareció en Comisión de Justicia este 18 de febrero, ahí se viene arriba.
Miren que la senadora del PP le puso de vuelta y media, como destacamos en la frase inicial, de igual forma que el resto de partidos, pero nada. El tipo, impasible. Como si la guerra no fuera con él. Hay que valer para eso.
‘La Retaguardia’ de este 19 de febrero versa sobre esto y mucho más en compañía de Pedro Lasuén, Coto Matamoros y Gisela Turazzini.