Titula Alfonso Ussía su columna de deste 11 de abril de 2025 en El Debate con un enfoque tangencial: “Molestias generadas”.
Arroja una mirada crítica sobre los entresijos políticos y empresariales que rodearon el rescate de Air Europa, una operación marcada por contactos chapuceros y más que cuestionables decisiones gubernamentales.
Ussía señala que Javier Hidalgo, hijo del fundador de Globalia, aunque menos astuto que su padre, encontró una salida para la aerolínea al recurrir a conexiones personales. Esta estrategia involucró a Begoña Gómez, esposa del presidente Pedro Sánchez, en un entramado que mezcla intereses privados y públicos.
Según Ussía, Hidalgo recurrió a Begoña Gómez para desbloquear el rescate estatal, consciente de su influencia como esposa del presidente. Esta maniobra quedó reflejada en mensajes interceptados por la Guardia Civil, en los que se evidencia cómo Gómez se reunió con Hidalgo en varias ocasiones para «encontrar la vía del rescate»:
«Hidalgo hijo, que no es tan listo como su padre pero de tonto no tiene un pelo, halló la fórmula, el camino de su salvación. Llamar a Begoña Gómez, la mujer de Sánchez, una mujer de ambiciones sobresalientes.»
La implicación directa de Gómez en estas negociaciones añade un matiz polémico al caso, cuestionando la transparencia y legitimidad del proceso. Las reuniones entre Javier Hidalgo y Begoña Gómez fueron fundamentales para garantizar el rescate. Estas citas no fueron casuales ni inocuas; según informes policiales citados por el autor, estuvieron diseñadas para influir directamente en las decisiones del Gobierno. En este contexto, escribe:
«Se reunieron en diferentes ocasiones para ‘encontrar la vía del rescate de Air Europa’. Todo ello con el objetivo claro: garantizar la aprobación del Consejo de Ministros para salvar la compañía.»
Este respaldo oficial culminó con una inyección pública multimillonaria que evitó la quiebra de Air Europa pero dejó dudas sobre posibles conflictos de interés.
La sombra del tráfico de influencias
El artículo también subraya cómo estas acciones han salpicado la reputación del Ejecutivo. La figura de José Luis Ábalos, entonces ministro de Transportes, emerge como otro actor clave en este complejo tablero político-empresarial. Según Ussía:
«Ábalos fue pieza fundamental para desbloquear el millonario rescate público. Su relación con Hidalgo y con otros intermediarios resultó decisiva para que los fondos fueran aprobados sin mayores obstáculos.»
Las conexiones personales parecen haber tenido un peso desproporcionado frente a los cauces institucionales habituales.
Implicaciones éticas y políticas
Finalmente, Alfonso Ussía reflexiona sobre las repercusiones éticas y políticas del caso. La implicación directa de figuras cercanas al presidente Sánchez plantea interrogantes sobre la separación entre lo público y lo privado:
«¿Qué líder permite que su entorno familiar medie en decisiones de esta magnitud? Si Sánchez lo sabía –y todo apunta a que sí– resulta evidente que consintió esta intromisión impropia.»
En este sentido, el autor reclama mayor claridad por parte del Ejecutivo y advierte sobre el desgaste creciente que estas prácticas generan en las instituciones democráticas.