La degradación de la política y de la izquierda española en particular es para hacérselo mirar.
Si hace unos días Reyes Maroto llamaba asesina a Isabel Díaz Ayuso, ayer la izquierda más sectaria, fanática, radical y fascistas de verdad, se reunió para intentar impedir que Macarena Olona ofreciera una conferencia en la Universidad de Granada.
La deriva totalitaria de la izquierda que se cree la policía de la moral es absoluta, y este hecho lo confirma. Que en la universidad, donde debe existir la libertad de cátedra, se intente impedir que políticos y personalidades que defienden posturas de derechas participen en coloquios y debates es simplemente surreal.
Sin embargo y pese a los esfuerzos de los facinerosos, no lograron su objetivo. La ex de Vox aguantó el tipo y pudo participar en la charla.
Pero que la izquierda social se quede cada vez más sin argumentos es consecuencia de los nefastos manejos de la izquierda política. Y un responsable directo es Pedro Sánchez, que ve cómo la corrupción cada vez le pringa más.
El empresario que confesó que se llevaba entre el 15 y el 20% a cambio de amañar la contratación de obra pública da nuevos datos que hacen temblar a La Moncloa. Pero el hombre ha seguido cantando la traviata y ha señalado directamente a Santos Cerdán como el “testaferro de José Luis Ábalos y a quien Koldo reportaba cada día”.
La trama de corrupción socialista conocida como caso Koldo sigue expandiendo el fango por Moncloa y cada vez son más los salpicados por los negocios opacos que ha llevado a cabo el Ejecutivo sanchista.
Estos y otros asuntos de actualidad son tratados por Alfonso Rojo en el ‘24×7’ de este martes, 18 de marzo, junto a César Sinde, Bertrand Ndongo y Juan Velarde.