El Ejecutivo de Pedro Sánchez ya no sabe cómo esconder los intentos de asaltar PRISA.
El último ejemplo, tal y como recordó Vicente Vallés en su informativo en Antena 3 Noticias, fue en la sesión de control al Gobierno Sánchez cuando se eludió una pregunta clara y directa hecha por el principal partido de la oposición, el PP:
Hoy lo más destacado en el Congreso fue cuando Feijóo ha preguntado a Pedro Sánchez sobre las denuncias de una posible presión de Moncloa a accionistas del Grupo PRISA, propietario del diario ‘El País‘ y de la Cadena SER, y también ha preguntado sobre la utilización de Telefónica para intentar controlar a determinados medios de comunicación. Todo empezó cuando el presidente del Grupo PRISA se negó a crear una nueva cadena de televisión con una línea editorial cercana a Moncloa.
Después, el pasado 11 de febrero, el ministro Oscar López participó en una cumbre sobre inteligencia artificial en París. Allí estaba acompañado por el nuevo presidente de Telefónica, Marc Murtra, que fue promovido a ese cargo precisamente por el Gobierno. Y según ha publicado el semanario francés ‘Le Point‘, el ministro López presionó a la compañía francesa Vivendi para que vendiera sus acciones en Prisa a empresarios cercanos a Moncloa.
Vallés no dudó en señalar qué se persigue con esa presión:
El objetivo de esa presión sería forzar un cambio en la cúpula del Grupo PRISA. Este lunes, el presidente del Grupo Prisa publicó un artículo en su propio diario, en ‘El País’, en el que denunciaba estos movimientos y llegaba a comparar a Pedro Sánchez con Franco.
Y criticó la estrategia gubernamental de responder con ‘manzanas traigo’ a todas las preguntas incómodas hechas por la oposición:
Hoy, en el Congreso, Feijóo ha pedido a Sánchez que dé alguna explicación sobre este asunto. El presidente ha respondido que Mazón y Ayuso. Se pregunta sobre Telefónica y el Grupo PRISA y se responde sobre Mazón y Ayuso. Y así ocurre invariablemente en cada sesión de control al Gobierno. Esta tarde fuentes de Moncloa han dicho que no tienen ninguna responsabilidad sobre el Grupo Prisa. Aunque en realidad nadie ha preguntado sobre la responsabilidad del Gobierno en ese grupo de medios, sino sobre su presunta intención de controlarlo.
