Evitar los abucheos

Lo de Sánchez viene a ser como soplar y sorber al mismo tiempo. Se gana el derecho a ser abucheado, puesto que quiere que todo el mundo sepa quién manda aquí, y que no le importan las leyes, las costumbres ni los usos. Ah, pero luego pretende que le aplaudan y le tiene envidia a Ayuso, porque a ella sí que la aplauden.

No va a acompañar al Rey a la entrega del Cervantes. Si pudiera prohibirle que no fuera… Es cobarde, hay que decirlo, aunque todo el mundo lo sepa. Se pasa la vida imponiendo sus porquerías a todos los españoles y después no es capaz de dar la cara. De cambiar huesos de sitio sí. Por decreto nos impone como fue la génesis de la guerra, pasando por encima de testigos y de historiadores, y del mismo modo se declara vencedor de la misma, aunque en modo alguno pudo estar allí. No se da cuenta, en su ignorancia, de que con su actitud está reconociendo de forma explícita que la mayor culpa de que hubiera guerra la tuvieron Largo Caballero y el gobierno del que formaba parte.

No tolera que le echen en cara nada, enseguida se le nota y no tarda nada en irse cuando ocurre, que es muy a menudo. No tiene educación ni la conoce. No soporta que lo abucheen y se enfada mucho si el Rey aguanta el tipo como un valiente, mientras que él tiene que huir protegido por un nutrido grupo de guardaespaldas. ¡Pobre, qué pena da! Veremos cómo se toma los hechos cuando el juicio de la dana lo señale directamente, lo cual tiene que ocurrir quiera o no quiera Nuria Ruiz Tobarra, la juez de Catarroja, que parece que viva en una burbuja al margen de las gentes que saben.

Pues ya tenemos a toda la familia Sánchez y adheridos sufriendo el escrutinio de los jueces, mientras Pumpido se desespera.

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Vicente Torres

Vicente Torres es Coautor de '1978. El año en que España cambió de piel' y autor de 'Valencia, su Mercado Central y otras debilidades' y 'Yo estoy loco', 'Diario de un escritor naíf', 'El Parotet y otros asuntos' y '2016. Año bisiesto'. He participado en los libros 'Tus colores son los míos', 'Enrique Senís-Oliver' y 'Palabras para Ashraf'.

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