La negativa de Pedro Sánchez a declarar ante el juez Juan Carlos Peinado el pasado 30 de julio de 2024 sigue copando las tertulias televisivas.
Previsiblemente, este mes de agosto, el ‘Begoñagate’ seguirá siendo un quebradero de cabeza para los inquilinos de la Moncloa que verán afectadas sus vacaciones por este caso de presunta corrupción. Después de esta cita, el líder del Ejecutivo anunció que se querellaría por un presunto delito de prevaricación contra el juez Juan Carlos Peinado y su sustituto, Carlos Valle.
La encargada será la Abogacía General del Estado la que la lleve el asunto al Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) basándose en dos resoluciones, por una parte, la disposición por la que se citó al marido de Begoña Gómez como testigo, y por la providencia por la que se rechazó que declarase por escrito.
Jaime de los Santos, diputado del PP, defendió en el plató de ‘Espejo Público’ al magistrado instructor, que está siendo objeto de ataque por parte de la izquierda:
«150 años de una ley, da la risa, cuando alguien pretende hacer pasar por prevaricador a un juez que cumple escrupulosamente con sus obligaciones«.
Los puntos antiestéticos
La activista Afra Blanco saltó apuntando al magistrado en defensa de la querella del presidente del Gobierno:
«Aquellos que hemos defendido que esta investigación nos parece prospectiva, algunos que hemos defendido esta instrucción, como una instrucción que muta, cuestión que no debería suceder en este estado, aquellos que hemos dicho que parece que se intenta rebuscar con un claro fin por parte de un juez que es dañar la imagen de Begoña, porque así se daña también la imagen del presidente y hemos dicho que está cuestión tiene puntos absolutamente extraños cuando un juez solicita informes a la Guardia Civil y estos avalan que no hay causa, y aún así el juez sigue buscando […] la respuesta que se nos da es que si prevarica que se querelle, ¿dónde está el problema ahora entonces?«.
A lo que Jaime respondía que se trataba de «normalidad democrática» y Blanco prosiguió sacando la cara por la esposa del presidente:
«La respuesta de aquellos cuando algunos hemos defendido esta cuestión como extraña… por investigar a una persona por realizar un trabajo que ya realizaba en el año 2011 con un Gobierno del PP. Aquellos que ya hemos dicho que las relaciones de Begoña con la Complutense ya se dieron en el 2011 con el PP en el Gobierno… ¡Puede haber un juez que prevarique!«.
La conversación subió de intensidad y el diputado popular le recordó a la sindicalista los puntos extraños y poco estéticos del caso:
«La pregunta es… lo que sí nos vienen demostrando es que hacen un uso desde mi punto de vista, bastante poco estético, de lo que el Estado representa. La señora Gómez utiliza a su secretaria para llamar por teléfono a quiénes le deben dinero que viene como consecuencia de una herramienta que le han regalado otras empresas. Y, ahora, el señor Sánchez, cónyuge y testigo en la causa, utiliza a la Abogacía del Estado, esto es antiestético«.
Jaime de los Santos abroncó a Afra de nuevo después de que calificase de «circense» al juez instructor de la causa:
«Porque me parece Afra querida, muy peligroso que desde un lugar en el que muchas personas se informan, alguien diga que un juez hace una ‘performance'».
